Una controvertida decisión que vincula narcopolítica, diplomacia y justicia en año electoral. JOH seguirá en Estados Unidos por su seguridad.
Por José Serén
Tegucigalpa, Honduras — El expresidente hondureño Juan Orlando Hernández recuperó su libertad este lunes tras ser indultado por el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. Gracias a este perdón presidencial total e incondicional, Hernández salió de una prisión federal donde cumplía una condena de 45 años por narcotráfico.
La condena, dictada en Nueva York, provenía de una serie de graves cargos presentados por el Departamento de Justicia. Estos incluían conspiración para importar cocaína a Estados Unidos y posesión de armas de fuego, los cuales pintaban un cuadro de varios años de presunta actividad criminal durante y después de su mandato (2014-2022), periodo en que, según los fiscales, fue el eje de una vasta conspiración narco.
La liberación fue confirmada por su abogado, Renato Stabile, y por familiares del exmandatario. La prueba burocrática llegó con la actualización en el portal del Buró de Prisiones federales: su expediente, con el número 91441-054, cambió de la fecha original de liberación (diciembre de 2025) para reflejar su salida inmediata.
Ana García, esposa de Juan Orlando Hernández, dijo la mañana de este martes que su esposo permanecerá en Estados Unidos por ahora debido a preocupaciones por su seguridad.
“La situación en el país no es fácil para él la situación de inseguridad, todas las amenazas que conocemos que han existido en contra de su vida, de su seguridad”, dio García.
Justificación desde Washington
El presidente Donald Trump defendió su decisión argumentando que Hernández fue víctima de «una trampa tendida por la administración anterior». En declaraciones a bordo del Air Force One, afirmó: «La gente de Honduras realmente pensó que le habían tendido una trampa (…) analicé los hechos y estuve de acuerdo». Aunque no presentó pruebas concretas, Trump responsabilizó indirectamente a asesores del gobierno de Biden (2021-2025).
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, respaldó la medida afirmando que Trump decidió el indulto «tras escuchar las preocupaciones planteadas por sus partidarios». Leavitt agregó que la condena respondió a un «exceso de procesamientos» durante la era Biden, y desestimó que indultar a un narcotraficante convicto contradijera la política antidrogas de la actual administración.
Reacción familiar: «Dios es bueno»
Ana García de Hernández, esposa del exmandatario, celebró públicamente la noticia: «Dios es bueno. Gracias a Dios. Has cambiado nuestras vidas». En un mensaje dirigido a Trump, afirmó que su esposo es «un hombre inocente, víctima de una trampa de la izquierda radical y el Estado profundo». Reivindicó su gestión anticorrupción y aseguró que enfrentó «un juicio amañado» donde «no se permitió declarar a testigos creíbles». La familia agradeció «el apoyo del pueblo hondureño» tras «casi cuatro años» de lucha legal.
La esposa del exmandatario dijo a Reportar Sin Miedo que vive un momento “muy feliz”. Señaló asimismo que Trump “es un hombre que ha pasado por un proceso similar” en Nueva York y que, por ello, “conoce la manipulación política”.
García afirmó que el caso de su esposo fue resultado de lawfare y de una negociación política impulsada por funcionarios del gobierno de Libre. Sostuvo que “la justicia ha prevalecido” y que Hernández está “en proceso de recibir un perdón completo” que lo traería “muy pronto a casa”.
Ana Hernández dijo que había hablado con Juan Orlando en libertada. «Esta en un lugar seguro y está bien, nos sentimos bien», dijo.
Expertos denuncian hipocresía
Mike Vigil, exjefe de operaciones internacionales de la DEA, calificó la decisión de «hipócrita» en declaraciones a The Guardian. «Todo el esfuerzo contra las drogas de Donald Trump es una farsa», afirmó. Vigil contrastó los recientes ataques a «barcos de drogas» —que habrían matado a unas 80 personas, muchas posiblemente pescadores— con el indulto a Hernández, a quien consideró responsable de mover «miles de millones de dólares en cocaína».
El experto destacó la singularidad del caso: «Cuando echas un vistazo a Pablo Escobar y ‘El Chapo’ Guzmán, eran grandes narcotraficantes, pero nunca fueron presidentes de un país». Vigil también cuestionó la narrativa de Trump sobre el «Cártel de los Soles» en Venezuela, señalando que, si bien Nicolás Maduro «no es un santo», la acusación de liderar una estructura narco carece de sustento: «No tienen infraestructura. […] son tonterías».
La liberación de Hernández ocurre en un año electoral tanto en Honduras como en Estados Unidos, y revive el debate sobre la instrumentalización de la justicia antidrogas, la diplomacia entre ambos países y los límites del poder presidencial estadounidense.
María Elvira Salazar sobre el indulto a JOH
La congresista republicana María Elvira Salazar manifestó su desacuerdo personal con la decisión del presidente Donald Trump de indultar al expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, aunque evitó una crítica directa a la autoridad presidencial.
En una entrevista con Dana Bash de CNN, Salazar respondió de manera ambivalente: «yo no habría hecho eso, pero no soy la comandante en jefe y no tengo la pluma que concede los indultos. No sé qué pasó…»
Al ser presionada sobre si consideraba el indulto un error, reiteró: «Yo no… escuche, el presidente tiene la prerrogativa y él toma las decisiones, pero si yo hubiera estado en esa posición, lo más probable es que… repito, no sé lo que pasó.»
Finalmente, ante la pregunta sobre si el indulto envía un mensaje contradictorio en la lucha antidrogas, concluyó:
«Yo creo que fue… yo nunca habría hecho eso. No creo que eso fuera lo que yo habría hecho.»
Salazar, conocida por su postura dura contra el régimen de Maduro y el narcotráfico, se desmarcó así del indulto sin confrontar abiertamente a Trump, destacando su desacuerdo personal mientras reconocía las facultades exclusivas del presidente.
Democratas critican a Trump
Legisladores hispanos del Partido Demócrata cuestionaron los bombardeos de Estados Unidos contra el narcotráfico en el Caribe ante el indulto del presidente Donald Trump al exmandatario hondureño Juan Orlando Hernández, cuya liberación trascendió este martes tras estar preso por sus nexos con carteles.
Senadores y congresistas acusaron de “hipocresía” al Gobierno por argumentar que los ataques a más de 20 lanchas en el Pacífico y el Caribe, que han dejado al menos 83 muertos, son para detener el flujo de drogas, mientras Trump liberó a un expresidente sentenciado a 45 años de prisión por narcotráfico.
“Mientras Pete Hegseth (secretario de Guerra) está ilegalmente bombardeando botes y matando a docenas de personas en el Caribe por presunto narcotráfico, Donald Trump está perdonando a un notorio y convicto narcotraficante, Juan Orlando Hernández. Hipocresía deshonrosa”, publicó el senador Alex Padilla, de California, en X.
Los demócratas objetaron la estrategia de Trump contra el narcotráfico por la liberación de Hernández, quien salió el lunes de prisión tras llegar extraditado en abril de 2022 a Estados Unidos, donde en marzo de 2024 lo sentenciaron a 45 años de prisión por tres cargos de narcotráfico y armas, mas cinco años de libertad vigilada.
El expresidente incluso estuvo acusado de recibir dinero del capo mexicano Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán para financiar fraudes electorales a cambio de participar en una conspiración que introdujo más de 500 toneladas de cocaína, pero Trump
dijo que el exmandatario estadounidense Joe Biden (2021-2025) le “tendió una trampa”.
Joaquín Castro, representante federal de Texas, recordó que el Departamento de Justicia estimó que ayudó a introducir 4.500 millones de dosis de cocaína a Estados Unidos, además de “estar al centro de una de las mayores y más violentas conspiraciones de narcotráfico en el mundo”.
“Él es responsable de las muertes de innumerables ciudadanos estadounidenses y ahora lo perdonará Donald Trump. No me digan que Donald Trump está matando personas en botes en el Caribe para detener el tráfico de drogas”, escribió Castro en sus redes sociales.

