Las críticas se basan en las casi inexistentes revelaciones que arroja una auditoria -en etapa de borrador- sobre el uso final dado a las cuantiosas donaciones que hizo la Asamblea por gestión de los diputados.
Transparencia Internacional -capítulo de Panamá- Juntos Decidimos y la diputada Ana Matilde Gómez son algunos de los que insistieron en que es necesario llegar al fondo, es decir, determinar si el dinero donado llego a sus destinatarios finales, y no solo debe concentrarse en las fallas de los procesos administrativos usados para otorgarlas.
El informe, pese a que es muy vago, revela cuánto dinero gestionaron los diputados, ya que descubre los códigos secretos que estos utilizaron para esconder sus identidades al momento de realizar las donaciones, que en gran parte no llegaron a sus beneficiarios
CUMPLIR SUS FUNCIONES
La Contraloria General de la Republica (CGR) ha preferido guardar silencio. No ha explicado por qué ordeno revisar únicamente los procesos administrativos de las donaciones y contratos por servicios profesionales de la Asamblea Nacional. Tampoco la razon por la que no ha auditado el uso final dado a unos 15 millones de dólares que repartieron los diputados a particulares en supuestas donaciones.
Este medio contacto; ayer nuevamente -mediante llamadas, correos y mensajes- al contralor, Federico Humbert, y a su Dirección de Relaciones Publicas, pero no hubo respuesta.
La Prensa público; ayer el borrador de una auditoria efectuada por la CGR, incluyendo una tabla dinamica en la que se muestran las donaciones gestionadas por diputados con sus respectivos codigos secretos y los nombres y cedulas de los beneficiarios, asi como la fecha y hora en la que se cambiaron los cheques y en que bancos.
Para esta labor, el contralor encomendó la tarea a la Dirección de Auditoria Interna, la única dirección de auditoria de la CGR que, según el Manual de Organización de la institución, no ve el manejo de fondos externos a la Contraloría.
Múltiples voces repudiaron el tipo de auditoria que ordeno; Humbert, que ya lleva unos 10 meses practicándola. Este informe seria pieza fundamental para que el Ministerio Publico investigue a asistentes que responden a los diputados, y que ofrecían estas ayudas y luego se quedaban con el 95% del cheque de la donación o de los contratos temporales de trabajo.
La Corte Suprema de Justicia desestimo investigar por la falta de la llamada “prueba idónea”.
Para la diputada de libre postulación Ana Matilde Gómez, la auditoria “se quedo corta y es insuficiente”; puesto que lo que se quiere saber es el destino final de los fondos públicos.
Con una auditoria prolija se acabaría con el morbo y se podría procesar al diputado que cometió peculado, dijo Gómez, quien también aparece en el listado de las donaciones entregadas por los diputados.
Gómez aclaro que en su caso, el dinero se fue a su destino final. Una de estas donaciones
–Explico- fue al reconocido músico panameño Danilo Pérez para apoyar el Panamá Jazz Festival, donación que está documentada, afirmó.
“Lo que realmente interesa es descubrir cuáles de esas donaciones fueron falsas, cuántos de esos dineros usaron testaferros, una persona, empresa pantalla o una necesidad ficticia para que el dinero volviera a manos del propio diputado, eso es lo que a la gente le preocupa y ahí es donde está el delito”, enfatizo; Gómez.
A su juicio, el problema es el uso del dinero y no las donaciones, que están sustentadas en una partida aprobada por el Ministerio de Economía y Finanzas y firmadas por el funcionario de la Contraloría.
Gómez solicito; aclarar que la responsabilidad de la administracion de la Asamblea está en su junta directiva y no en los 71 diputados.
A su vez, la Fundacion para el Desarrollo de la Libertad Ciudadana -capitulo panameño de Transparencia Internacional- califico el hecho como “inexplicable”.
“Sin el trabajo de los entes de control y fiscalización, como lo es la CGR, es imposible ganar la batalla contra la impunidad y la corrupcion. Al llegar al cargo, el contralor nos pidió paciencia debido a la enorme cantidad de procesos en marcha, pero es evidente que el tiempo de la paciencia ya paso”, opino Lina Vega, presidenta del organismo.
En diciembre pasado, Transparencia Internacional le envió una carta al contralor respecto a las auditorias de las donaciones de la Asamblea. “Sin ellas, es imposible que avancen las investigaciones. Lamentablemente, ni respondió ni envió las auditorias al Ministerio Publico”, acoto Vega.
“Es injustificable que casi un año después de haber anunciado el inicio de las auditorias en la Asamblea, la CGR no haya tenido el compromiso de realizar la labor que el país demanda” sobre todo en momentos de disgusto generalizado por los innumerables actos de corrupción, sostuvo Freddy Pitt, de Juntos Decidimos.
El contralor “se ha burlado del pueblo” al incumplir su rol fiscalizador. “Parece que se ha dedicado a dilatar, encubrir a los diputados corruptos” y “está obstaculizando la justicia”, por lo que debería renunciar, opino el dirigente.
Para el abogado constitucionalista Miguel Antonio Bernal, “eso no se puede llamar siquiera auditoria, es una práctica que ha venido implementando el señor contralor para evadir las funciones de su cargo y tenemos que exigir que cumpla su deber” subrayo.
El Movimiento Independiente (Movin) sostuvo que la Contraloría tiene la obligación de entregar la auditoria completa lo más pronto posible y con ella determinar la responsabilidad de los procesos administrativos y revelar los diputados “que se hayan aprovechado de los contratos y donaciones para fines distintos a los que fueron originalmente destinados, como revelo la investigación de La Prensa”, dijo su presidenta, Annette Planells.