Icono del sitio Las ultimas noticias de Honduras y el mundo

Desafíos de nuestras ciudades: El calor urbano

Hace muchos años un buen amigo me dijo que la prueba mas grande que él tenía sobre que no existe la evolución es “porque si existiese, en San Pedro Sula ya todos fuésemos iguanas por el calor”.

En su momento, me pareció muy cómico y hasta el día me sigue causando risas. Sin embargo, con el tiempo y algunas experiencias he aprendido como nuestra sobrada capacidad de adaptación y resiliencia ha permitido que de alguna manera normalicemos el incremento del calor en nuestras ciudades sin que se tomen medidas desde la creación y ajuste de políticas publicas locales y nacionales para realmente tratar el asunto como se puede y se debe.

En este mes se celebra la COP30, que es la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que tendrá lugar en Belém, Brasil, del 10 al 21 de noviembre de 2025. Y en Honduras, a pesar de que estamos en plena campaña política, el cambio climático y el calor urbano en las ciudades parece no ser parte de la agenda de los candidatos y candidatas a la presidencia, al congreso nacional y a las alcaldías.

El calor urbano es un riesgo para la salud publica: Al vivir en nuestra Honduras, en la mayor parte del territorio es normal experimentar intensos calores en el día a día, especialmente en verano. Son recurrentes los comentarios y opiniones sobre si hay “peor” calor en San Pedro Sula, El Progreso, Choluteca o incluso Tegucigalpa.

El nivel de calor no es un asunto de comodidad, es un riesgo para la salud publica y en Honduras hemos tenido desde desmayos[1] hasta muertes[2]. Si, el calor mata[3] y somos uno de los países es que ha presentado mayor incremento de victimas en las ultimas dos décadas en latinoamerica.

Cabe resaltar que en los casos de las muertes relacionadas con el calor no necesariamente significan que esta sea la principal causa pero si contribuye, especialmente cuando se tienen condiciones preexistentes de salud que pueden agravarse con el incremento del calor corporal[4].

Por ejemplo, en Estados Unidos la mayor cantidad de victimas por riesgos o peligros climáticos no se debe a tornados ni huracanes o el frío como quizás pensaríamos algunos, es por las olas de calor[5]. En Honduras ya hemos empezado a tener un incremento de victimas en los últimos años y las autoridades de salud junto a los medios de comunicación contribuyen en socializar medidas personales para enfrentarlas pero aun no tenemos políticas o proyectos desde las autoridades municipales y nacionales.

El calor y la violencia: El calor impacta nuestro estado de animo y en los últimos años se han incrementado las investigaciones y estudios que establecen una relación entre los grados de calor y el incremento de la violencia[6], siendo uno de los mas notables uno del Grantham Research Institute de la London School of Economics[7].

En nuestro país, durante el TEDxSanPedroSulaWomen del 2017 en la charla denominada: “San Pedro Sula, ¿Como le hacemos?”, en el minuto 9:42, la Dra. Maria Angélica Milla[8] menciona algunos datos estadísticos sobre esto en la ciudad de San Pedro Sula.

¿Existirá algún programa, proyecto o política publica  de prevención de la violencia o de seguridad ciudadana que tome en consideración la relación grados de calor y violencia en Honduras?

El calor y la economía: El calor afecta la economía familiar al elevar el consumo de energía por el aire acondicionado y el uso del ventilador para climatizar nuestras casas cuando se incrementan las temperaturas. Ademas, el sobreúso de los diferentes aparatos puede llevarnos a sustituirlos de forma mas frecuente y las temperatura altas sostenida reducen la vida útil de muchos equipos electrónicos en general. Y con los “apagones” esto se complica mas.

En muchos países, existe un apoyo económico para pagar la factura energética por razones climáticas extremas: la calefacción tan necesaria en tiempos de invierno y también durante la temporada de calor. Esta medida se dirige para el apoyo a la población mas vulnerable y así de esta manera las familias no tienen que decidir entre dejar de comer y comprar medicamentos o pagar la factura eléctrica para no sufrir el embate climático.  En Honduras podríamos decir que eso se encuentra indirectamente cubierto por el subsidio del consumo de energía eléctrica del actual Gobierno. Es indirecto porque no está focalizado directamente a razones de riesgo climático pero sin duda tiene un efecto positivo gracias al trascendental reconocimiento del acceso a la energía eléctrica como un derecho humano y luego por la política clara del subsidio que contribuye a hacer efectivo el goce de ese derecho.

Cambio climático y el calor: Los efectos del cambio climático proyectan que las temperaturas van a empeorar en los próximos años y hasta el momento, en nuestra Honduras no existe estrategia urbana nacional ni local para enfrentar de forma integral esta nueva realidad en las ciudades. Recientemente, la Organización Meteorológica Mundial señaló que “cada uno de los últimos 11 años, de 2015 a 2025, habrá sido uno de los 11 años más cálidos desde que se inició el registro de observaciones hace 176 años, y los últimos tres serán los tres años más cálidos de los que se tiene constancia[9].”

Las olas de calor afectan a decenas de municipios, los ubicados en el corredor seco tienen mucha vulnerabilidad. Sin embargo, es en las ciudades donde se experimenta mayor incremento debido a su crecimiento e infraestructura que multiplican las islas de calor. Las autoridades municipales son quienes deberían tomar las principales medidas con el apoyo del Gobierno Nacional.

Ademas, cuando las temperaturas suben, puede aumentar la contaminación del aire como lo reconoció el Sexto Informe de Evaluación (AR6) del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC).[10]

En Honduras tenemos al Centro de Estudios y Control de Contaminantes[11] (CESCCO), dependencia de la SERNA. Este el organismo técnico-científico superior del Estado de Honduras en materia de contaminación ambiental, se encarga de la investigación, prestación de servicios de análisis de laboratorio en las matrices agua, aire, suelo, sedimentos y alimentos, la vigilancia ambiental y gestión de sustancias químicas.” Sin embargo, da la impresión que se enfoca mas en el aspecto regulatorio y poco se sabe de la prevención y colaboración con la ciudadanía. No hay información interactiva y si se busca en redes son otros portales y no son gubernamentales quienes generan y socializan información sobre la contaminación del aire.

Las “islas de calor urbano”

Las “islas de calor urbanas” son áreas metropolitanas significativamente más cálidas que sus alrededores rurales, debido a los edificios, las áreas pavimentadas y las actividades humanas como el uso de automóviles[12].

Otra definición: “es un fenómeno donde las ciudades registran temperaturas más altas que las zonas rurales cercanas. Esto se debe al uso de materiales que absorben calor, la escasa vegetación y las emisiones del transporte y la industria. Sus consecuencias incluyen malestar térmico, mayor consumo energético y efectos en la salud[13].

La rápida urbanización del Honduras agrava el calor urbano debido a que nuestras ciudades tienen una planificación muy débil, poco ordenamiento del territorio, falta de políticas integrales de zonificación urbana y un difícil acceso a la vivienda social. Nuestros centros urbanos tienen pocos arboles e incluso se vuelven frecuentes las denuncias ciudadanas del corte indiscriminado de arboles de parte de las propias autoridades municipales.

Existe un estudio de la universidad de Reading[14] y publicado en la revista Climate and Atmospheric Science, que demuestra como las grandes ciudades están creando sus propias nubes debido a la energía liberada por al actividad humana. Quizás falta mucho crecimiento urbano para ese escenario en Honduras pero es parte de las posibilidades a futuro especialmente si no tomamos medidas.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística, en el Censo Nacional del 2023, tenemos menos de veinte (20) municipios con mas de 100 mil habitantes y todos estos tienen mayoría de población urbana. Afortunadamente, la mayoría de nuestras ciudades no tienen muchos edificios altos y por lo que el aire caliente no queda tan atrapado. Sin embargo, al no tener información de micro climas u otra información climática publica generada desde nuestras ciudades y con acceso para la población será muy difícil encontrar.

El desafío de “enfriar” nuestras ciudades.

¿Y si así como sucede en otros países, la mayoría tuviésemos los recursos necesarios para climatizar nuestras casas y lugares de trabajo con aire acondicionado (A/C) sin preocuparnos tanto por el “recibo de la luz”? Escenario poco probable por los niveles de pobreza y pobre extrema que tenemos pero sería interesante saber si la ENEE podría lidiar con esa demanda de consumo de energía en horas pico.

Sin embargo, al hablar de “enfriar” las ciudades no es en referencia al A/C, lo que realmente ocupamos es “regresar a la naturaleza” o como también se conocen: “Soluciones Basadas en la Naturaleza” (SBN). Aliarnos con la naturaleza es la forma mas eficiente de enfriar nuestras ciudades y la mas sostenible. Adicionalmente, las SBN bien implementadas contribuyen a que enfrentemos otro de nuestros grandes desafíos: reducir los riesgos de inundación en zonas urbanas.

Algunas Soluciones Basadas en la Naturaleza para enfriar o volver mas frescas las ciudades:

a) Reforestación urbana y corredores verdes: Necesitamos ciudades mas verdes y contemplar diferentes soluciones. Plantar arboles es una gran solución pero no siempre es la mejor, depende del contexto y del espacio físico.

b) Agricultura urbana: Construir e incentivar los huertos urbanos es uno de los grandes pendientes en nuestros municipios porque fortalecen la seguridad alimentaria.  Ademas, contribuyen a enfriar las ciudades

c) Suelos permeables: Enfrentar el calor urbano implica que repensemos la sustitución de las calles de concreto o asfalto por materiales mas porosos y alternativos. Debemos ir superando el paradigma de que cemento equivale a desarrollo. Lo ideal, es armonizar de forma sostenible ese encuentro entre infraestructura gris, verde y azul. Esto también reduciría las inundaciones frecuentes que tenemos en centros urbanos, algunos países como China y Dinamarca lo han avanzado tanto junto a otras políticas que de manera integral han contribuido a transformar sus ciudades en “ciudades esponja”.

En algún momento, en nuestro país elevaremos la discusión y conversaremos seriamente sobre el uso de los automóviles o vehículos para incrementar el control de emisiones, tenemos un desproporcionado aumento de vehículos por no tener sistema de transporte masivos. Desafortunadamente, por ahora parece muy complicado por el pobre estado de nuestro transporte publico que se sigue deteriorando por sus unidades con pésimo mantenimiento y desfasadas, horarios disponibles y cobertura insuficiente de rutas. Y todo eso agravado por los todavía altos niveles de inseguridad así que cada sector, colonia y barrio tienen sus particularidades y complejidades de acceso por el control territorial de grupos delictivos.

Ademas, también existen soluciones alternas y sencillas como pintar o revestir los techos de blanco o que estos sean de materiales altamente reflectivos como sugiere la Universidad de Boston en un estudio reciente[15].

Iniciativas en otras ciudades de las que se puede aprender:

Estamos a tiempo de intervenir en nuestras ciudades que son pocas y no tan pobladas como en diferentes parte del mundo. Necesitamos implementar medidas efectivas de prevención antes de que sea demasiado tarde.

Recomendaciones:

Autor: Oscar Orlando Hendrix Escalante


[1]      https://www.tunota.com/honduras-hoy/dos-ninas-se-desmayan-en-catacamas-olancho-por-ola-de-calor-2024-05-17

[2]      https://www.radiohrn.hn/honduras-registra-muertes-golpes-de-calor-relacionado-estres-altas-temperaturas-2024-04-24

[3]      https://elpais.com/america-futura/2024-04-23/el-calor-mata-america-latina-registro-un-140-de-muertes-mas-por-esta-causa-en-20-anos.html

[4]      https://www.epa.gov/climate-indicators/climate-change-indicators-heat-related-deaths

[5]      https://journals.plos.org/climate/article?id=10.1371/journal.pclm.0000610

[6]      https://www.laprensagrafica.com/tendencias/El-calor-aumenta-la-violencia-Cientificos-revelan-la-impactante-relacion-entre-el-clima-y-las-conductas-agresivas-20240319-0062.html

[7]      https://www.lse.ac.uk/granthaminstitute/publication/understanding-interpersonal-violence-impact-temperatures-mexico/

[8]      https://youtu.be/ZlvorLXXqBg?si=X3atHB2xyTGo4QBJ

[9]      https://wmo.int/es/media/news/se-mantiene-la-tendencia-al-calentamiento-extremo-2025-camino-de-ser-el-segundo-o-el-tercer-ano-mas

[10]    https://es.wri.org/insights/calor-y-contaminacion-la-combinacion-mortal-que-amenaza-las-ciudades

[11]    https://serna.gob.hn/direcciones/cescco/

[12]    https://www.dw.com/es/qu%C3%A9-son-las-islas-de-calor-urbanas/a-73146117

[13]    https://www.geoenciclopedia.com/isla-de-calor-que-es-caracteristicas-causas-consecuencias-y-soluciones-1090.html

[14]    https://www.bbc.com/mundo/noticias-48531389

[15]    https://www.nature.com/articles/s43247-025-02462-3

[16]    https://sites.google.com/view/santiagohot/mapas-de-calor

[17]    https://municipiosverdes.sustentahonduras.org/

Salir de la versión móvil