Un buen número de manifestantes que se sumó al gran paro nacional convocado por la dirigencia magisterial y de salud, atestaron este jueves la zona de Toncontín, al sur de Tegucigalpa.
Ante esa situación, las puertas del aeropuerto internacional de Toncontín permanecían cerradas y un contingente de la policía antimotines resguardaba sus instalaciones.
La situación generó entre los vecinos y transeúntes un ambiente de tensión, debido a que temen que en cualquier momento pueda iniciarse un enfrentamiento.
Y es que algunos de los manifestantes, según testigos, estaban insultando a los agentes e incluso les lanzaban piedras.
Luego de varios minutos los agentes del orden, dispersaron a los manifestantes con el uso de gas lacrimógeno, pues algunas personas intentaron romper la barrera de seguridad para causar disturbios dentro del aeropuerto.