Por David Torrez
El más reciente Sondeo de Opinión Pública 2025, presentado por el Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación (ERIC-SJ), revela un panorama preocupante sobre la percepción ciudadana respecto a la situación del país y el desempeño del gobierno de la presidenta Xiomara Castro. La mandataria fue calificada con una nota promedio de 4.13 sobre 10 en su tercer año de gestión, la más baja desde su toma de posesión.
El estudio, realizado entre el 17 y 28 de marzo, abarcó 16 departamentos del país y evidenció que el 67.7% de la población considera que el gobierno ha sido poco o nada transparente, mientras que el 52.1% califica su gestión como mala o muy mala. A ello se suma una percepción de estancamiento: el 49.2% cree que el país sigue igual, y el 39.9% afirma que ha empeorado.
Los principales problemas señalados por la ciudadanía son la crisis económica y el desempleo (48.9%), la inseguridad (22.2%), y la corrupción (6.4%). En cuanto al estado de excepción implementado por el gobierno para enfrentar la criminalidad, el 70.6% de los encuestados considera que no ha resuelto el problema.
La desconfianza hacia las instituciones también persiste. La gran mayoría considera que el narcotráfico mantiene una presencia significativa en el Estado (71.6%), y el 75.8% respalda la continuidad del tratado de extradición. Por otro lado, la esperanza en la instalación de la Comisión Internacional Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (CICIH) se debilita: seis de cada diez ciudadanos no creen que llegue a concretarse.
En el ámbito electoral, el sondeo también registró un alto grado de desconfianza: el 69.1% de la población opinó que las elecciones internas fueron poco o nada transparentes. No obstante, el 80.8% manifestó intención de participar en las elecciones generales del próximo 30 de noviembre, reflejando una ciudadanía crítica pero aún comprometida con el ejercicio democrático.
En cuanto a cultura política, el estudio muestra un escaso interés general por los temas políticos, pero un mayor compromiso con los asuntos públicos. Las iglesias evangélicas y católicas se posicionan como las instituciones que generan mayor confianza, mientras que los partidos políticos, el Congreso Nacional y el Consejo Nacional Electoral son vistos con alta desconfianza.
Finalmente, la migración continúa siendo una válvula de escape frente a las difíciles condiciones económicas: casi la mitad de los encuestados ha pensado en abandonar el país, principalmente por la falta de empleo y oportunidades (48.7%).
El informe completo ofrece una radiografía clara de los desafíos que enfrenta Honduras y presenta una hoja de ruta basada en la voz de la ciudadanía, con una demanda urgente por reformas, transparencia y soluciones concretas.


