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Historia.– Juan Ramón Molina, destacado poeta y escritor hondureño, dejó un legado tan impresiónante, que trece personas se volvieron locas.. Sí, locas, por su legado, sus letras, su pasión y determinación.
El primer comité pro monumentos a Juan Ramòn Molina fue organizado en 1913 por iniciativa de Froilán Turcios y con apoyo de los socios de El Ateneo de Honduras.
Pero fue en los años 70’s que un grupo de intelectuales hondureños decidieron que aunque el escritor había partido de esta tierra, no era el momento de quitar el dedo del renglón de las letras de ese maestro de la literatura.
Fue así que se formó el «Comité Pro Monumentos a Juan Ramón Molina» también conocidos como «Los Trece Locos del Guanacaste».
Con el propósito de honrar y preservar el legado del destacado poeta y escritor hondureño se reunían todos los sábados sin falta aquellos hombres y mujeres con mucha sapiencia.
Esta convocatoria tenía como lugar de destino las instalaciones de la Asociación de Prensa Hondureña (APH).
Intervención de Raúl Lanza Valeriano para la colocación del monumento de Juan Ramón Molina
Corría el año de 1980, cuando, en una gestión ante el Consejo del Distrito Central, realizada por el periodista Raúl Lanza Valeriano como presidente de la APH y dueño de la Revista Hibueras, logró obtener un espacio para un monumento.
Fue la cesión legal de un lote en el Parque La Libertad de Comayagüela destinado por supuesto para el propósito por el que se peleó, que hoy descanse la increíble imagen del poeta Molina en aquel espacio.
Para el año 1990 el comité de los trece se reorganizó y este fue presidido por el ilustre intelectual, Eliseo Pérez Cadalso, pero no estuvo solo en esta faena, es aquí en donde aparecen los otros 12 miembros:
- Antonio Osorio Orellana
- Raúl Lanza Valeriano
- Dionisio Ramos Bejarano
- Héctor Elvir Fortín
- Agustín Córdova Rodríguez
- Magda Argentina Erazo
- Juan Domingo Torres Barnica
- Elpidio Alejandro Acosta Navarro
- Marco Rolando San Martín
- Marcial Cerrato Sandoval
- Daniel Vásquez
- Mario Hernán Ramírez.
Existe un dato curioso, y es que en toda esta lista de intelectuales, solamente aparece una mujer, pero no cualquiera, es Magda Argentina Erazo quien ha tenido un muy importante papel en la sociedad hondureña.
En la actualidad, solamente uno de los llamados «Trece Locos del Guanacaste» sobrevive, y es Marcial Cerrato Sandoval, quien hoy ha compartido con Ángel Rafael Lanza, hijo de otro de los «locos» originales, de don Raúl Lanza Valeriano.
