Las deportaciones desde Estados Unidos de salvadoreños, guatemaltecos y hondureños se han elevado un 583,8% al cierre del primer trimestre de 2022, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Entre enero y marzo de 2022, la cifra de retornados para el Triángulo Norte de Centroamérica desde Estados Unidos ha sido de 24.157 personas, frente a los 3.533 devueltos en el mismo lapso de 2021.
Del total de personas repatriadas, 12.041 son hombres y 6.652 mujeres, mientras que las cifras de los niños han llegado a 2.808 y las niñas a 2.656. De igual manera, las deportaciones desde México a El Salvador, Honduras y Guatemala se han elevado un 38,1%, pasando de 20.558 casos en 2021 a 28.384 en la actualidad.
Las repatriaciones desde todos los países de salvadoreños, guatemaltecos y hondureños han aumentado un 117,1%, pasando de 24.250 casos en el primer trimestre de 2021 a 52.651 en los mismos meses de 2022.
Los datos acumulados que se registraron a principios de este año indican que las deportaciones a El Salvador fueron las que más se incrementaron con un 276% más, mientras que para Guatemala se elevaron un 173,3% y para Honduras un 107,9%.
Cada año, más de 500.000 personas procedentes de El Salvador, Guatemala y Honduras intentan emigrar de manera irregular a Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida, incluyendo miles de menores de edad. Organizaciones como Amnistía Internacional han denunciado en repetidas ocasiones las violaciones de derechos humanos que existen en estas migraciones.
