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TEGUCIGALPA-HONDURAS. Un total de 81 periodistas, comunicadores sociales, propietarios y empleados de medios de comunicación han sido asesinados desde 2001.
Dicha cifra se conoció luego que la oficina de Oficina del Alto Comisionadod de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) denunciara, el pasado viernes, el asesinato de otro comunicador social en el este país.
Lo anterior, ubica a Honduras como uno de los países considerados más peligrosos del mundo para el ejercicio del periodismo.
A través de Twitter, la OACNUDH Honduras lamentó «el asesinato del comunicador social y dirigente del partido Libertad y Refundación (Libre) Buenaventura Calderón. También, el asesinato de su esposa, Maribel Bolian». Añadió, que el crimen se cometió en el municipio de Puerto Lempira la noche del 31 de octubre, en el departamento de Gracias a Dios.
De acuerdo a medios locales, Buenaventura y su esposa ingresaban a su casa cuando desconocidos les dispararon desde un vehículo. Las causas del doble crímen aún se desconocen. Cabe señalar que Buenaventura era conductor de un programa en una radio local.
Más del 90% de los asesinatos están en la impunidad
En ese sentido, la OACNUDH informó que el comunicador era beneficiario de medidas del mecanismo nacional de protección. Las cuales, se las brindaban como directivo de la no gubernamental Plataforma Nacional de Incidencia Indígena de Honduras.
Por tal razón, dicha organización internacional instó a las autoridades a «investigar de manera pronta y efectiva». Esto, para dar con los responsables del crimen y ponerlos a la orden de la justicia.
Cifras de organismos de Derechos Humanos señalan que un total de 81 periodistas, comunicadores, propietarios y empleados de medios de comunicación han muerto de forma violenta desde el 2001 en este país centroamericano.
Es preciso recordar que el último comunicador asesinado en Honduras es Kerin Francisco Cerna, de 29 años. A él lo atacaron a disparos frente a su casa en la ciudad de Ruinas de Copán, al occidente del país.
Se debe especificar que más de 90% de los asesinatos están en la impunidad. Lo anterior, a pesar de haberse creado un mecanismo de protección de periodistas, defensores de derechos humanos y abogados. Dicho mecanismo lo integran representantes del gobierno y miembros de la sociedad civil.