Los firmantes somos hombres y mujeres evangélicos de organizaciones comprometidas con la causa de Jesucristo en Honduras.

EL ÉXODO SILENCIOSO DE HONDURAS SE AGRAVÓ

Esta semana hemos sido testigos de un éxodo masivo de varios miles de hondureños que huyeron con la esperanza de escapar de situaciones intolerables y para encontrar mejores condiciones de vida en países del norte. Este éxodo no es nuevo, pues ha sido constante aunque silencioso, día a día en los últimos años. La historia bíblica nos habla de migraciones y se demanda que no se maltrate a los extranjeros o migrantes. Éxodo 22:21 dice: “No maltrates ni oprimas a los extranjeros pues también tu y tu pueblo, fuisteis extranjeros”.

ESTOS DIAS ESTAMOS SACUDIDOS por la fuga desesperada de muchos de nuestros compatriotas. Vemos con dolor como hombres, mujeres y niños de toda Honduras siguen en caravanas, caminando bajo la lluvia, el frío, el sol y en medio de muchos peligros y riesgos para su salud y para su vida. Cientos de esos migrantes salieron de nuestras congregaciones y son extrañados por sus familias. Muchos migrantes hondureños desaparecieron y nadie volvió o volverá a saber de ellos.

NOS CONSUELA saber que Dios se interesa en los pobres y desamparados, como dijo en su canto María de Nazaret “De sus tronos derribó a los poderosos mientras que ha exaltado a los humildes” (Lucas 1:52). No podemos dejar de mencionar la actitud solidaria en general del pueblo guatemalteco y mexicano quienes han mostrado compasión y generosidad con la caravana de migrantes. No dudamos que muchos creyentes han puesto en práctica la demanda del Señor: “Así mismo debes tú mostrar amor por los extranjeros…” (Deut. 10:19 NVI).

RECONOZCAMOS LAS VERDADERAS CAUSAS

Estamos viendo en los medios de comunicación el cruce de ataques entre sectores políticos que se acusan mutuamente por generar las caravanas de migrantes, pero no podemos negar que el primer responsable es el Estado. No debemos ser ingenuos y entender que unos y otros usan la situación para llevar agua a sus molinos partidarios dentro y fuera de Honduras.

LA PRENSA nacional ha dado amplia cobertura a éxodos en otros países y hasta les han llamado crisis humanitarias. Sin embargo, llama la atención que en esos otros casos se asume que los responsables son los gobiernos y no se minimiza la situación catalogándolas como meras actividades de grupos opositores. Esa dualidad en los medios mueve a pensar que hay sesgo en la cobertura mediática.

NADIE PUEDE NEGAR la desesperación y la frustración social de los hondureños ante la ilegalidad, el irrespeto a la Constitución y otras leyes, el cinismo desde un amplio sector de la clase política, la corrupción, la injusticia, la impunidad, los altos niveles de pobreza, el desempleo, la devaluación de la moneda, la violencia, la inseguridad, el narcotráfico, la extorsión, el excesivo gasto militar, el sicariato, la falta de acceso a servicios de salud y los “trancazos” al bolsillo de los ciudadanos oprimidos por las deudas y el hambre.

NOS DUELE pensar lo que dicen, que Honduras es un Estado fallido o muy cerca de serlo. En los últimos años se han producido graves violaciones a la Constitución de nuestro país, fraudes electorales y escandalosos y perversos casos de corrupción manifestados en el saqueo de los fondos públicos. Estamos dolidos de haber llegado hasta aquí y no poder pararlo. La huida de nuestros compatriotas refleja nuestra derrota y debe llevarnos al arrepentimiento ciudadano. Ese éxodo debe causar una sacudida estructural nacional y debe llevarnos a un nuevo comienzo conducido por líderes que reflejen una ética diferente.

MUCHOS POLITICOS CORRUPTOS E INSENSIBLES se han burlado del pueblo con pactos de impunidad y falsos diálogos. Han robado dineros, votos, dignidades y esperanzas. ¿Por qué olvidan que van a cosechar lo que han sembrado? ¿Por qué olvidan que las maldiciones por sus actos tocarán a miles de ciudadanos incluidos a sus propios hijos y nietos? ¿Por qué no se arrepienten y se hacen a un lado?

TOCA EL ARREPENTIMIENTO, EL CAMBIO Y LA CORRECCION

RECONOCEMOS QUE LOS EVANGELICOS somos parte de esta sociedad y responsables de algunos pecados que traen consecuencias sociales. Pedimos perdón por haber sido ingenuos, superficiales, acomodados o aislados de la realidad de vida de nuestras congregaciones y de las comunidades. Pedimos perdón si hemos aceptado la pobreza y la injusticia como cosa inevitable, tolerándola con indiferencia y cobardía.

PEDIMOS PERDON por predicar del cielo futuro sin predicar de cómo seguir viviendo en la tierra presente. Perdón porque nos dejamos manipular por los políticos que sí vieron el poder de la Iglesia, pero lo prostituyeron para sus causas egoístas y sus ambiciones de poder.

PEDIMOS PERDON porque dejamos que supuestos profetas y pastores asalariados dieran la impresión de que hablan por todos los cristianos en este país. Los profetas bíblicos son ejemplo, porque recordaban a los gobernantes que no abusaran de los privilegios del poder. “Practicar la justicia, amar la misericordia, y humillarte ante tu Dios…” eso es lo que Dios nos ha dicho por medio de profetas (Miqueas 6:8).

SE NOS OLVIDO que aunque el ciudadano cristiano tiene deberes como ser respetar y orar por las autoridades gubernamentales, también tiene el derecho de reclamarles que gobiernen con justicia, rectitud y bondad, porque para eso han sido instituidas (Romanos 13:3).

RECONSTRUYAMOS A HONDURAS PARA QUE NADIE VUELVA A HUIR DE ELLA

LLAMAMOS A AUTORIDADES dentro y fuera de Honduras a proteger la vida y la integridad de los migrantes, pues la humanidad ha sido migrante por siglos y la vida humana debe ser protegida. Nos toca resolver con urgencia las crisis en Honduras, para que nadie vuelva a huir con tanta desesperación.

LLAMAMOS A LOS FUNCIONARIOS públicos a actuar con integridad y eficiencia porque fueron electos para eso y si no cumplen, se les demandará y juzgará por sus hechos.

LLAMAMOS A TODOS LOS CIUDADANOS a ser parte de una nueva construcción social, porque todos somos responsables del mal que hemos hecho y tolerado en nuestra vida y en nuestra sociedad, pero también somos responsables de corregir el rumbo con amor y decisión.

LLAMAMOS A LOS LIDERES CRISTIANOS a atender la realidad de sus congregaciones y comunidades, y a levantar una voz que clama por la justicia y la paz para este pueblo tan necesitado de guía divina y esperanza.

LLAMAMOS A LOS CRISTIANOS de este país a orar, reflexionar y actuar por el bien de nuestro país. Procuremos la paz promoviendo la justicia (Isaías 32:17). Cambiemos activamente y con urgencia la cultura de injusticia, deshonestidad y violencia que nos destruye. Que la cadena de la corrupción y violencia se empiece a romper en cada lugar adónde esté un cristiano, comprometido, porque la fe sin obras está muerta.

SENOR, trae Tu guía, justicia, paz, protección, provisión y esperanza a Honduras y a cada migrante donde quiera que se encuentre.

Tegucigalpa, Honduras, 24 de octubre del 2018

Fraternidad Teológica Latinoamericana – Capítulo Honduras
-Red del Camino – Honduras
-Fundación Lucas para la Salud
-Sociedad de Médicos Cristianos de Tegucigalpa
-Agrupación de Pastores de Colonia 21 y Colonia El Sitio
-HonduOra
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#PorUnaHondurasJustaYhonesta #YoTambién
#ForAJustAndHonestHonduras #MeToo

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