Radio Progreso
El 3 y el 12 de octubre son fechas muy importantes para la resistencia hondureña y centroamericana. El 3 de octubre recordamos el nacimiento de Francisco Morazán, símbolo patria grande centroamericana ausente y siempre como tarea. Un 12 de octubre llegaron los españoles, y con ellos el inicio del dominio extranjero sobre los pueblos y desde entonces los bienes y las personas pasaron a ser recursos a explotar. Y es el inicio de la resistencia indígena y popular a la dominación de las potencias extranjeras.
El sistema y quienes lo sostienen saben utilizar las fechas. Morazán fue un hombre de ideas y de propuestas, no fue soldado, pero las circunstancias lo obligaron a organizar un ejército de libertadores. Y estos bárbaros usan su nombre para unos feriados que dispersan y se usan para meternos el puñal a la sociedad entera.
Los militares hondureños convirtieron el 3 de octubre en el día del soldado, y en nombre de la inteligencia se justifica la fuerza bruta y la barbarie. El 12 de octubre es la fecha de la invasión extranjera. Pero el sistema le llamó el día de la raza, para justificar las continuadas invasiones y dominaciones a que ha sido sometida la población hondureña y centroamericana.
A la par del calendario cívico oficial, emergen las luchas de resistencia de los pueblos. Octubre es un mes de rebeldías y de memoria de luchas. No en vano en este mes de octubre emerge el rostro, la imagen, palabra y sangre de Carlos Escalera. Mientras los discursos oficialistas se llenan de palabrería, demagogias y proselitismos, las calles comienzan a llenarse no solo de afiches por votos, sino de un pueblo en lucha.
Mientras el discurso oficial se llena la boca exaltando a los militares, mucha gente se organiza y recupera las ideas de Morazán y Escalera para defender el agua, los derechos de los trabajadores y de los desempleados, la tierra, los bosques y el medio ambiente. Mientras el discurso oficial exalta la conquista y el mestizaje, mucha gente se organiza y planifica acciones centroamericanas para rebelarse en contra de dictaduras y criminales.
Octubre es hondureño y centroamericano, es urbano y es campesino, es popular y es indígena, es local y es nacional. Octubre es convocador de géneros, es juvenil y es femenino, y en este nuestro octubre las ideas fluyen y se transforman en mística y en propuestas transformadoras. Octubre es memoria de sangres libertarias, y desde ellas estamos convocados para crecer en ternura popular por la construcción de un pueblo rebelde, nacido para la libertad.
